Confesiones a mitad de semana

Hace poco más de una semana le di vida a este blog. Me quedé sin trabajo, como quien no quiere la cosa, antes de volver de mi post natal y esto me impulsó a que de una vez por todas cuente mi historia.

Una historia que tiene como protagonistas a dos seres humanos que crecieron en mi panza por poco más de 7 meses (tenían tantas ganas de conocerme que les llegó todo y se adelantaron un pocotón). Una historia que, estoy segura, puede ser la misma historia de muchos ojos que silenciosos leen estas líneas. Una historia que primero tuve que asimilar, digerir y contar, porque no es tan fácil confesar que buscaste bebe por mucho tiempo y nada.

Pasé por muchos momentos incómodos hasta ahora, pero con el tiempito que llevo siendo mamá aprendí que una mujer no es «menos» mamá por haber recibido ayuda para concebir. Una mujer no es «menos» mamá por no haber tenido leche. Una mujer no es «menos» mamá por no haber traído a sus hijos al mundo por parto natural… y muchísimas cosas más.

Una mujer es mamá desde el momento que su corazón, su mente y su cuerpo entero desean serlo. Pero nuestra sociedad es tan extraña que se ha encargado de hacer creer lo contrario.

Cuando supe que tendría mellizos ya sabía a lo que me enfrentaba. Preguntas y más preguntas (algunas sin ninguna mala intención y otras súper intencionadas) vendrían sin parar y yo tendría que estar preparada para responderlas de la mejor manera.

Una vez superada esa etapa del «miedo a que me tilden como menos mamá» pude decir todo tal cual pasó. Incluso muchas personas cercanas me dicen «cómo es que no sabía nada de esto? Pensé que me tenías confianza», a lo que yo siempre respondo que no es un tema de confianza, sino de superación.

Ahora puedo decir con orgullo por todo lo que pasé, con orgullo mostrar y contar sobre esas marcas que dejó la batalla. Digo con orgullo porque el resultado final es simplemente el mejor: Naelle y Marcel.

Y si con esto, puedo ayudar en algo al menos a esas mamás ocultas que tanto desean tener un bebé en sus brazos (sea de la manera que sea), mi reto por fin estará cumplido.

Ser mamá empieza en el corazón, no en la panza.

19 comentarios en “Confesiones a mitad de semana

  1. Sin desmerecer la espera de 9 meses (porque la concepción es divertida), la parte más real y dura de ser padre o madre es cuando empiezas a criarlo y educarlo, sobretodo esto último, educar con el ejemplo es cosa de titanes en estos días con todo el entorno en contra. Pero es el mejor curso que puedas encontrar de cómo ser mejor persona.

    Respecto al trabajo, creo que es la mejor decisión, Naelle y Marcel te necesitan por lo menos dos años a dedicación exclusiva, luego puedes buscarle una nana.

    Algún día contaré de toda mi experiencia al respecto.

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    • El quedarte sin trabajo es una preocupación enorme pero la compensación es sencillamente maravillosa CRIAR TU MISMA A TUS HIJOS, no hay nada mejor en el mundo que estar con ellos y verlos crecer , te felicito por tus bbs están hermosos . El trabajo va y viene eso lo aprendi luego de trabajar por casi 20 años, me siento realizada como ama de casa. Besos a los bbs 😉

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      • Denisse gracias. Es verdad lo que dices. Pero en mi caso es necesario trabajar, pues no se puede enfrentar los gastos de dos bebés… es increíble.
        Muchas gracias y que lindo tenerte por aquí!

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    • Gracias Elmo, me encantan tus comentarios porque son tan reales y sinceros. Muchas cosas al respecto. Este etapa es la más dura, es verdad pero sí, totalmente de acuerdo contigo de que esto te hace ser mejor persona.
      Lo del trabajo no es tan sencillo, no podemos solventar gastos solo con un ingreso. Es muy difícil criar a dos a la vez que tienen las mismas necesidades. No lo decidí yo… me sacaron durante mi post natal porque no me van a renovar contrato. Ya contaré esa historia. Nana, tengo pero como apoyo, porque la verdad sola con dos es muy difícil… mil veces he estado a punto de tirarme x la ventana… uf, cosa de locos!
      Te mando un beso!

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  2. si con uno yo sufro ya me imagino con dos. Eres muy valiente y seguro que lo estás haciendo muy bien. Siempre existe el dilema de trabajar o dedicarse a los hijos. El factor económico es aveces el que decide. Tienes la posibilidad de una nana, supervisada por un familiar tuyo y también existe la posibilidad de una guardería. Averigua. Mi hijo se queda en guardería-nido desde los dos años, pero también he visto que hay bebés desde los 6 meses. Tienes que averiguar bien y pedir referencias. Saludos.

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    • No sabes como me pregunto y pregunto si lo estaré haciendo bien Eduardo… es complicado como dices y más si es que sientes que de la nada te quedas sin piso y empiezas a preocuparte por cómo mantener a la familia. Es difícil.
      Un beso!

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  3. Se es mamá y punto. No hay más mamá ni menos mamá. Están son COJUDECES que aún no entiendo para qué sirven. Lo que más molesta es que vengan de otras mujeres, no falla. Madre es la que ama, la que cuida, la que educa y lo da todo por sus hijos, sin importar la forma en que fueron concebidos, parto natural o cesárea, epidural o no, qué más da? Lo bueno viene luego, no un día, sino todos ls días. Cada cuerpo es un mundo y lo de la leche, si se puede alargar al máximo, pues qué suerte, pero no todas podemos. las madres adoptivas tampoco pueden y tampoco han pasado por la experiencia del parto, y jamás serán menos madres que las que nosotras, porque lo has dicho bien, se empieza a ser madre en el corazón.

    Beso 🙂

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  4. Yo soy una mamá epidural y no me siento menos mamá que nadie. Todo lo contrario Emma me hace sentir la mejor mamá del mundo cada vez que me lo dice.

    Yo no me quedé sin trabajo, yo renuncié despues del post, es que vi a mi nena tan pequeña que el día que tuve que regresar llamé para decir que renunciaba.
    Estuve con ella hasta el año, tuve que regresar a trabajar, pero disfrute cada segundo de nuestra estadía juntas.

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