Hola, soy Marité Alarcón. La verdad es que ese nombre se esconde de uno un poco más largo que solo escuché cuando pasaban lista en colegio y la universidad, por eso solo soy Marité. Veterinaria frustrada y comunicadora de profesión. Tengo 30 y soy una mamá que luchó mucho por ganarse el privilegio de serlo. Por eso, quiero compartir mi historia con todos. Para que sepan que todo es posible y nada se niega en esta vida.

Me encanta leer, escribir y podría decir que me casaría con el chocolate si fuera una persona. Amo las cosas simples de la vida como el olor de la lluvia mezclándose con el suelo una tarde de invierno, el color del cielo cuando las nubes se van de vacaciones, la música a todo volumen en el espantoso tráfico limeño, el sonido de las uñitas de mi perro cuando camina sigiloso hacia mi cuarto para colarse en mi cuarto por la noche, como las reuniones familiares todos los sábados en mi casa a la hora del almuerzo, las conversaciones con mi papá a larga distancia (no es tan fácil comunicarse con el cielo todos los días), y los detalles especiales que por más chiquitos que sean hacen de un día gris el más colorido de todos.

Tampoco es que sea un «sweetie pie», hay muchas cosas que me sacan de mis casillas y puedo ser un loco harapiento son furia. No por nada me gané el título de «Maria Estres» en la universidad, pero así me quieren.

Soy fiel a la frase que dice que solo hay dos días en los que no se puede hacer absolutamente nada: el ayer y el mañana. Esos días no existen, solamente se vive el hoy y hay que hacerlo de la mejor manera. Y es hoy yo agradezco a la vida por permitirme estar donde estoy, viendo a mis dos hijos cada día más grandes y con los ojos con más ilusión por ver más! Y qué mejor regalo que ser yo quien les muestre eso que se llama «mundo». Ese mundo que con tropezones y piedras en el camino los hará crecer.

Empecé este blog por ellos. Por Marcel y Naelle, mis dos motivos de creer en que todo se puede si uno realmente cree.

Soy una mamá de mellizos que espera que disfrutes de este lugar tanto como yo.