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Música para nuestros oídos

Muchas veces escuché eso de la musicoterapia y nunca pensé que fuera a ser tan cierto. El lenguaje de la música y los sonidos nos permiten viajar y explorar cada rincón de espacio que tal vez nunca hemos conocido en nuestro interior. Y cuando se trata de la familia es un remedio excelente. Los oídos se desarrollan y por medio de ellos el alma se nutre de pasajes y caminos que no conocieron con los ojos. Incluso, desde que un bebé está en la panza de su mamá puede experimentar cosas que, obviamente, no recordarán luego pero sí podrán «volver a vivir» por medio de la música.

Desde que me enteré que estaba embarazada me compré unos audífonos grandes. Tan solo con tres semanas la panza ni se veía y estoy segura que quienes estaban adentro mío eran tan solo unos frejolitos que no oían nada de nada, yo empecé con la musicoterapia. Encontré unas canciones bellas que cada vez que escuchaba me ponían la piel de gallina y sin pensarlo dos veces se las enseñé a mis bebés (o MI bebé porque hasta ese momento solo pensé que había uno). He tratado de encontrarlas en YouTube pero simplemente no existen y me da una pena tremenda porque son hermosas. Lo que puedo decirles es que si las buscan en cualquier bajador de música como artista Sleepy Baby las canciones son hermosas. Son flauta pura y la mejor de todas es Bedtime. Haré todo lo posible por encontrarlas y mostrárselas como sea. Les dejo por mientras dos canciones hermosas en otras versiones parecidas.

Ya cuando mis bebitos se movían en mi panza al ponerle estas canciones ellos sabían que yo les hablaba. A la hora de dormir le ponía este tipo de canciones para que se fueran a dormir conmigo y desde ahí ya les fui haciendo su horario. Se movían al escuchar las canciones y luego ya se quedaban tranquilos. Ahora, se las pongo en la noche para dormir y las dejo corriendo en volumen bajito hasta el día siguiente. En la mañana cuando me despertaba para ir a trabajar les ponía otro tipo de canciones. Para ser más exacta, les ponía diferentes de Babies Go. Es una colección que tiene todo tipo de música, desde Quenn hasta el mismísimo Juan Luis Guerra en versión bebés.

Así ellos solitos desde la panza sabían cuando empezaba el día y cuando llegaba la noche. Eso, acompañado de mucho pero mucho de mi voz para ellos creo que los ayudaron a hacerse una idea de cómo se desarrollaban los días en el mundo real al que ellos se enfrentarían luego.

Era hermoso ver cómo se movía mi panza, eran como olas que iban y venían, literalmente porque uno estaba abajo a la izquierda y la otra arriba a la derecha. Uno le respondía al otro con movimientos.

Cuando ya nacieron, al escuchar esas canciones era increíble ver cómo se tranquilizaban y poco a poco se quedaban dormidos. Ya después fui haciéndolos escuchar a la clásica Miss Rosy, La Gallina Pintadita que aman con locura y las canciones de La Granja. Pero eso será motivo de otro post porque esos dibujos locos están cada vez más de moda y los bebes se alocan cuando los ven por el famoso y tan genial Netflix. A mí me facilitó la vida realmente!

Un último disco que descubrí cuando tenían dos meses más o menos es un disco hermoso que se llama «A child’s gift of lullabyes». Tiene canciones lindas con letras que tienen tanto significado que hacen llorar a cualquier mamá hormonal y no hormonal también. Por ejemplo, yo que tengo el disco completo escuché todas y puedo decir que una de ellas es la canción que les dedicaré a mis hijos toda la vida hasta cuando se casen y tengan a sus hijitos (que no llegue ese momento por favoooor).

 if i could i would give you wings
to lift you way up in the air
and you could find the rainbow then wing would get you there

if i could i would give you wings
to carry you out of the storm
and take you higher than the wind and you’d be safe and warm

wings little wings
wings in the wink of an eye
soon your little wings will be big enough to fly

if i could i would give you wings
to lighten you heart throught the years
thyed flutter soft around you then
and dry up all your tears

Simplemente esta canción me eriza la piel y me hace suspirar mientras los tengo cargaditos y apachurrados al 100%. Me pongo a bailar con ellos frente al espejo y se las canto una y otra vez.

La música es un gran y poderoso aliado, creo que si desde chiquitos les enseñamos diferentes sonidos, ritmos y melodías, estaremos contribuyendo al desarrollo auditivo al máximo.

Y ustedes, les ponían música a sus bebés desde la panza?

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